2 de diciembre de 2014

Angostura: La vereda Chocholoma y Palmas en sus espantos





Al llegar a la vereda Palmas del Municipio de Angostura, la visión de los caminos que se riegan desde la escuela hasta los más remotos lugares, hace pensar en cuántos seres no transitaran esos parajes.

Los primeros colonos en llegar a estas tierras fueron mineros, como en casi todos los pueblos de Antioquia. Buscaban oro y plata en ríos y socavones y con el tiempo fueron aprendiendo -supongo- el oficio ancestral de la agricultura, actividad que predomina hoy en día en estas montañas del norte antioqueño.
 Preguntando, entonces, por esos caminos, me contaron que no solo son rutas que llevan a las casas, a los cultivos de café o a las quebradas, sino que en ellos a veces suceden apariciones de seres extraordinarios, que “pa mi dios bendito” que muchos lo han visto “patenticos”. No son invenciones mías, ni de quienes cuentan la historia. Por ello transcribimos aquí los testimonios -de puño y letra- de sus protagonistas. 



La llorona
Por: Mery Johana Vélez Atehortúa, Grado 6°

Según lo que me han contado en la vereda, la Llorona era una mujer que antes era normal y vivía muy lejos de Angostura. Se vino a vivir por acá y quedó embarazada, pero cuando tuvo al bebé se volvió loca. Dicen que por eso abandonó a su hijo y desde entonces lo busca por los montes, por los ríos y quebradas. Cuando sale a buscarlo llora mucho, por esta razón le dicen la Llorona.

La Llorona se le aparece a los niños pequeñitos porque piensa que uno de ellos es su hijo perdido. Aparece entre las diez y las doce de la noche. Me imagino que lleva puesta ropa mugrosa, podrida y rota, su cara también debe ser sucia, sus ojos negros y su cabello enredado y lleno de hojas y ramas.
 

La Madre Monte
Por: Francy Yeraldín Echavarría Arroyave, Grado 6°

Le tengo miedo a la Madre Monte porque me contaron que en el monte de mi vecino Hernán, sale ella a las ocho de la noche haciendo bulla, moviendo las ramas y los palos. También me contó mi mamá que la Madre Monte se le aparece a los niños groseros, usa ropa limpia, un sombrero roto y se mantiene en los rastrojos. Es por eso que si uno se mete por esos lados y escucha gente conversando y cortando leña, es porque por ahí anda la Madre Monte.




El Sombrerero
Por: Jhonny Rodríguez, Grado 10°

Cuentan las personas que el Sombrerero es un espanto con apariencia de una persona que trabaja en la agricultura y que tiene un enorme sombrero. El Sombrerero anda en un caballo negro que bota fuego por los ojos y por la boca, tiene dos perros que siempre están junto a él, arrastrando unas cadenas.

El Sombrerero no tiene hora fija para aparecerse, lo hace a cualquier hora de la noche. Dicen que se le aparece a los borrachos, drogadictos, a los que andan muy tarde de la noche, a los que se portan mal con sus padres y a los que cometen adulterio. Cuando se aparece lo hace por medio de un relámpago y dice estas palabras: -¡Si te alcanzo te pongo este sombrero!

Si el Sombrero alcanza a alguien, se lo lleva y nadie lo volverá a ver nunca; pero si la persona corre, encuentra una puerta y la pasa, el Sombrerero no podrá cogerlo porque él no puede pasar por las puertas y se devuelve furioso.


La Bruja
Por: Tatiana Andrea Rivera Velásquez, Grado 7°

Me da mucho miedo cuando hablan de las brujas, y esto porque un día estaba con mi hermanita en su habitación cuando pasó una bruja carcajeándose. Me han dicho que cuando una bruja se dedica a molestar a las personas les hace cosas muy fuertes, como no dejar que hablen o también, cuando alguien va solo por un camino, lo enbolata haciendo que se pierda. Dicen que hay brujas que tienen poderes para hacer daño a las personas, como ponerlas a padecer enfermedades graves. Me produce mucho miedo la risa de una bruja.

Según lo que cuentan la gente mayor, gente de más conocimiento como los abuelos, las brujas salen en la noche, tienen muchos poderes y son malas personas. No creo que por acá en mi vereda haya brujas, pero dicen que si le dices a una persona, de la cual se sospecha que es bruja, que vaya al otro día a tu casa por sal, y si esa persona aparece a pedirte sal, es porque sí es bruja.

Por lo general, los abuelos o las personas mayores nos cuentan muchas cosas de la vida anterior, del pasado, cosas que no vimos pero que nos producen miedo.


El Ánima Sola
Por: Ones Julián Serna, Grado 6°

El Ánima Sola es una persona que produce miedo porque se anda con un vestido blanco y en su cara se refleja mucho terror. Se le aparece a la gente que no reza a las ánimas y que son groseras; aparece en las noches, después de las doce. El Ánima Sola acompaña y defiende a las ánimas, es por esto que nunca se le aparece a las personas que le rezan a las ánimas, porque le gusta que lo hagan, y por esto las trata de una manera muy cariñosa. Nunca he visto a una y no quisiera encontrármela nunca. Las personas de mi vereda la describen como una persona que refleja mucha tristeza, su bata blanca está podrida y rasgada. En pocas palabras es una persona que produce mucho terror.


El Comeojos 
Por: Yeidy Milena Tabares Metrio, Grado 9°

El Comeojos es un horroroso monstruo que solo tiene un gran ojo, una pequeña boca, no tiene nariz ni orejas, tiene cuerpo de pollo, tiene manos humanas y patas de pato, mide aproximadamente 3 metros de alto y 2 metros de ancho.

La historia del Comeojos comienza con un hombre que vivía en el campo y estaba en la miseria, hasta que un día se le apareció una bruja que le prometió mucho dinero y felicidad. El hombre le preguntó a la bruja que qué era lo que debía de hacer y la bruja le respondió que tenía que esperar mucho tiempo en la forma como ella lo iba a dejar. La bruja le quito un ojo al hombre, lo enterró, lo convirtió en el monstruo que se describió anteriormente y le dijo que si quería ser rico tenía que comer muchos ojos. Actualmente, se oye decir que toda persona que camine por el campo sola en la noche la perseguirá el Comeojos.  

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